miércoles, 15 de enero de 2014

Imsomne



Insomnes


Creen que no los ven,
en los lánguidos anocheceres.
Ya llegan sus horas buenas.
Se vestirán de oscuros colores.
El bullicio diurno, atroz,
apagaba sus voces,
que suenan como un viejo fagot…
Ronco.
A nadie hieren lo suficiente
como para hacerse notar.
Son ángeles esquivos
que divulgan mensajes equívocos,
y esnobs.
Queman cuero y neumáticos,
en su versión vespertina,
pero solo esla primera función.
En las horas mudas,
en callejas cutres,
promueven muertes ignoradas,
hasta que la luz del día
descubra los rastros
del antiguo miedo.
Ellos empujan el mal
sin que los reconozcan,
pues no tienen cuernos,
ni colas.
Huelen a maderosos perfumes
exóticos.
No a humos sulfurados.
Visten Armani.
Y no frecuentan otro infierno
que éste.
Donde no desentonan
ante tanta mala muerte.


                               Jorge

No hay comentarios:

Publicar un comentario