viernes, 1 de febrero de 2013

Aguas apareadas



El río entregó su sangre
al estuario hambriento,
que digiere su jugo
y lo mezcla,salobre
en sus entrañas.
Se vierte en el mar
que apenas se resiste.
Se agita.
Copula.
Se une
Se abraza
Se funde...
en el frío ritual.
Se encabrita.
Ruge
Golpea
Se eleva
Se plancha
Se aplaca
Se hunde...
y reflota.
Y ya no hay río
sino mar.
Puro mar
Eterno mar
Ultimo mar
que se lame.
Se arremolina
Se perfuma de algas.
Se agranda
Se eterniza.
Se besa con la playa.
Se retira...
y regresa,sin pausa
por otra caricia
de arena y de sal.

                     Jorge

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